27 abril, 2010

"Prometo jugar duro todos los días"

Jody Davis espera aprender mucho de la pelota rentada venezolana Las preguntas se van acabando acerca de la situación con el futuro mánager de las Águilas del Zulia, para la temporada 2010-2011, que arrancará el próximo 12 de octubre, en Maracaibo, ante los Cardenales de Lara. Hace tres semanas, Luis Rodolfo Machado, Gerente General de los rapaces, anunció que Jody Davis sería el próximo timonel del equipo emplumado. Firme en su decisión de traer un entrenador norteamericano viajó en el mes de marzo a Estados Unidos en busca de una persona que cumpliera con las características que el busca para el bien de la novena. "Tuvimos una buena experiencia con Eduardo Pérez en las últimas temporadas. Pero también es cierto que los años más gloriosos de Águilas del Zulia ha sido con dirigentes extranjeros", comentó Machado Silva. La apuesta del alto mandatario del pentacampeón de la Liga venezolana de Béisbol Profesional luce un poco arriesgada, debido a la poca experiencia que presenta estratega extranjero para dirigir en una liga tan exigente como la nuestra. Sin embargo, la historia le da la razón, aunque por muy poco margen, ya que tres de los cinco campeonatos de los zulianos en Venezuela fueron ganados por dirigentes "importados". Davis, desde su residencia en Mesa, Arizona, sede de los campos de Ligas Menores de los Cachorros de Chicago, conversó un poco acerca de lo que será su primera experiencia como dirigente en las ligas invernales, donde espera poder triunfar y ligar de lleno a los que son las costumbres de nuestro país con respecto al béisbol, donde comenzaría a trabajar a partir del 20 de septiembre, fecha tentativa puesta por el mismo estratega. ¿Firmó con Águilas del Zulia para la próxima zafra? -No he firmado el contrato oficial, pero tenemos un acuerdo acerca del contrato. Luis Rodolfo Machado me lo hizo llegar por medio de Rubén Amaro (Padre) a través de un correo. Es decir, ¿Está todo listo para concretarlo? -Sí. El contrato está casi listo. Sólo me falta revisar unos detalles y se los haré llegar con mi firma en unos días. Espero todo tenga un buen camino. ¿Quién habló con usted para dirigir al equipo? -Luis Rodolfo Machado y Rubén Amaro me contactaron acá en Mesa en medio de los Spring Training. Rubén y yo nos conocemos porque el me dirigió en los años 80 cuando yo jugaba para el equipo de los Cachorros como receptor. Tuvimos una buena relación así que agradezco me haya tomado en cuenta para ir a su país. ¿Por qué le gustó la idea de venir a dirigir en Venezuela? Es una gran liga. Su nivel de juego es muy alto. La pelota venezolana está mucho más cerca de un nivel de Grandes Ligas que las mismas Ligas Menores. Así que es una buena oportunidad. Además, me permitirá aumentar mi nivel como entrenador. No cuenta con mucha experiencia para dirigir ¿Cree que eso le cause problemas en nuestra pelota? -No lo creo. Nuestras ligas menores son más para el desarrollo de jugadores, para conseguir buenos muchachos para jugar en Chicago. Esta liga (la venezolana) es mucho más parecida a las Ligas Mayores, más competitiva y para jugar más para ganar. Y yo se jugar de ese modo. ¿Qué conoce acerca de nuestro país? -Que es un país hermoso, y la gente que conozco de allí es muy agradable. Los jugadores que he tenido son muy trabajadores y muy respetuosos a la hora de jugar al béisbol. Lo viven de gran manera. Se sienten realmente comprometidos con la disciplina y eso es importante. Antes de recibir a Machado y Amaro, ¿Había tenido alguna otro oferta para dirigir en la pelota invernal? -No. He sido un poco cuidadoso con el asunto de dirigir en la pelota invernal. La temporada es larga aquí y yo quería descansar después de nuestro trabajo. Pero considero que ahora es buen momento para ir allá y aprender de las costumbres y la forma como allá se juega. ¿Qué sabe usted acerca de Águilas del Zulia? -Que tienen una gran tradición para el béisbol. Han tenido un montón de grandes jugadores reconocidos. Tengo muchas ganas de ser parte de la tradición del béisbol criollo porque es contagiosa. Será divertido poder sentir lo que me han comentado acerca de ustedes. Buddy Bailey es considerado uno de los más importantes entrenadores que han venido a Venezuela en los últimos años ¿Habló con él? ¿Pedirá algunos consejos acerca de nuestra liga? -Sí hablamos y somos buenos amigos. Vamos a seguir hablando de este verano y estoy seguro de que me ayudará un poco en la forma como debo dirigir allá. ¿Qué tipo de pelota le gusta jugar? -La que me permita el roster. Uno siempre debe acoplarse y definir el tipo de juego dependiendo de ello. Pero amo este deporte, amo jugar a ganar. Me gusta jugar fuerte y apostar a ganador. Ese soy yo. ¿Qué necesitará para poder triunfar en Venezuela? -Pitcheo. Sí tienes buen pitcheo y buena defensa, siempre tendrás la oportunidad de ganar. Sin ellas requerirás de otras cosas. Pero si tienes buen pitcheo, puedes nivelar las cosas. ¿Qué necesita un equipo para ser ganador? -Tres simples cosas. Jugadores con disposición para jugar a ganar, buenos entrenadores que los orienten y una buena gestión. Todo junto es imbatible. ¿Conoce a alguno de los jugadores de Águilas del Zulia? Varios de ellos ya juegan en Grandes Ligas. (Carlos González, Gerardo Parra, Alberto Callaspo). -No. Apenas estoy empezando a conocer el roster que me hicieron llegar y comenzar a verlos. ¿Qué planes tiene? ¿Vendrá por varios años o sólo quiere probar una vez y ya? -No lo sé. La verdad, en lo único que pienso es en lo emocionado que me siento de poder ir allá. Es una gran oportunidad para mi. ¿Promete llevar al equipo a la postemporada? -Prometo jugar duro todos los días. Con eso, deberían llegar las metas que nos propongamos. La llegada de Davis a Águilas del Zulia... Eduardo Pérez dirigió a Águilas del Zulia las dos últimas temporadas guiándolas de forma exitosa a los playoffs dos veces de forma consecutiva. (2008-2009, 2009-2010), siendo estas dos las más exitosas para un mánager criollo con los zulianos desde la campaña 1993-1994, cuando Pompeyo Davalillo cubriera la ruta completa y terminara con 35-25, dueños del primer lugar de la desaparecida división Occidental. En los años previos, los zulianos probaron con diversos estrategas donde llegaron a la postemporada en una sola oportunidad con el norteamericano John Rusell en la 2007-2008, llevándolos hasta el tercer puesto en la ronda semifinal. Davis, al terminar de firmar su contrato, llegará con la difícil misión de hacer quedar bien a la gerencia zuliana. Publicado en el periódico Mi Diario el 28 de abril. Ampliado especialmente para este espacio.

26 abril, 2010

"Guti' es impresionate"

Andrew Jones y Torii Hunter son fans números uno del jardinero criollo ¿Qué relación tienen Roberto Clemente y Andre Dawson? Ambos, en ese orden, han ganado múltiples guantes de Oro en su carrera. Ambos están situados en el Salón de la Fama de las Grandes Ligas. Clemente lo hizo en 1973, en una elección especial después de muerto en un accidente aéreo cuando trasladaba, hacia Nicaragua, un cargamento de ayuda después de un terremoto que devastó la ciudad de Managua. Ganó doce Guantes de Oro con los Piratas de Pittsburgh. Andre 'El Halcón' Dawson, será inducido en septiembre después de ser electo el pasado mes de enero y obtuvo ocho compartidos entre los Expos de Montreal y los Cachorros de Chicago. Ambos tuvieron un sueño y no descansaron hasta conseguirlo: ser de los mejores jugadores en su posición. Dentro de esta categoría, al menos entre los jardineros, posición que cubrieron a cabalidad durante su carrera, se unen otros que aún no se cansan de seguir luciendo en las praderas. Andruw Jones y Torii Hunter son de esos seres. Entre los dos poseen un total de 19 Guantes de Oro, todos, de manera consecutiva. El primero, alcanzó diez como jardinero de los Bravos de Atlanta. El segundo obtuvo nueve, siete con los Mellizos de Minnesota y dos con los Angelinos de Los Ángeles de Anaheim. Buscar una similitud entre esos guarda bosques es muy sencillo ya que ambos se han dedicado a rescatar cualquier pelota que represente peligro para que sus rivales anoten. Ambos poseen gran olfato para partirle con tiempo a los batazos y, lo mejor, es que lo hacen con elegancia. Como si supieran hacia donde va la esférica antes de ser conectada por el bateador. Con el bate, han sido reconocidos. El curazoleño, quien participara con los Tiburones de La Guaira por sólo 12 encuentros y dejara promedio de .306 en la campaña de 1996-1997, es décimo en cuadrangulares entre los activos con 394, a sólo seis del selecto grupo de 400, liderado por Lou Gehrig y Fred McGriff. También ganó un Bate de Plata en el 2005, cuando disparó 51 estacazos y remolcó a 121 compañeros. 'El Cazador', Torii Hunter, también lleva sus halagos al conquistar el Bate de Plata como jardinero en el 2009, cuando bateó para .299 con 22 jonrones y 90 remolcadas, y dejar un OPS de .873 y Slugging de .508. Ellos no son los únicos con este tipo de números. Ichiro Suzuki también entra en este club con nueve manoplas doradas alcanzadas y con números realmente impresionantes como bateador. Pero existe uno en particular que llama altamente la atención y que comienza a considerarse uno de los mejores, por no decir el mejor, de las Grandes Ligas. Franklin Gutiérrez todavía no ha ganado uno, pero Jones y Hunter comparten la misma opinión: "Guti" ganará uno muy pronto". "Franklin es tremendo outfielder", comenta Jones. "Lo mejor que el tiene es que no tiene miedo para realizar las jugadas y eso es importante. A veces cuando tienes miedo le partes atrasado a las pelotas o retrasas tu carrera por miedo a golpearte". Hunter, quien ganó siete de sus nueve Guantes Dorados con los Mellizos de Minnesota lo ve con un futuro enorme. "Gutiérrez es impresionante. Cuando lo vi por primera vez con Cleveland dije que era muy bueno. Posee todas las herramientas para ser un buen jardinero central. Buen alcance, buen brazo y excelente visión de juego", responde el ahora compañero de Bobby Abreu, con los Angelinos de Los Ángeles-Anaheim, lugar donde ha cosechado sus dos últimos premios al mejor outfielder de la Liga Americana. Para el espectáculo que representan las Grandes Ligas, no es sólo atrapar la bola, sino la forma en la que lo realizan, para ser considerados de los mejores. En ese aspecto, Franklin y Andruw se asemejan enormemente. "El es bien "lucido". El se mantiene siempre centrado en lo que desea hacer. Pareciera que algo lo controlora. Por eso es que es considero uno de los mejores jardineros centrales de la actualidad". ¿Cuál es la clave? "La mente. Si tu te mantienes concentrado y tranquilo, podrás hacer todo. El sabe donde está parado y hacia donde va manteniendo su cuerpo balanceado puede partirle a cualquier pelota, en cualquier momento y hacia cualquier dirección", explica Jones. "Tu puedes ver a muchos jardineros corriendo como locos buscando la pelota y nunca la van a alcanzar. En cambio, tu lo ves a él y sabes que le llegará a todas". Por su parte, Hunter explica que parte de la genialidad de Franklin es debido a su preparación física. "Estar en forma es importante. Debes trabajar muchísimo las piernas y hacer muchos carreras de velocidad. La fuerza de las piernas y la velocidad te harán llegar a cualquier lado", explica con detalles tratando de imitar un programa de ventas por televisión, pero manteniendo la seriedad del asunto. "Si no estas seguro de lo que tu cuerpo puede hacer, no tendrás la seguridad para hacerlo. No podrás lanzarte de cabeza, no te barrerás o estrellarás tu cuerpo contra la pared", enfatiza "El Cazador". Y tal vez tengan razón. El cuerpo de Franklin está unido a su mente. Así lo comentó para este espacio desde Peoria, donde se preparaba durante los Spring Trainig. "Yo trato de divertirme siempre. Divertirme implica tratar de tomar todas las pelotas posibles", relató. Pero también tuvo una importante preparación antes de ser pelotero. "Yo practicaba atletismo", confiesa, "tal vez eso me está ayudando en este momento porque se como preparar mi cuerpo para los trabajos de velocidad y fuerza". Pero los tres están claros de algo. Cada uno tiene un estilo especial de hacer las cosas que sirve para entretener a sus fanáticos. Al menos Hunter no se siente amenazado porque el capitalino se convierta en otro Cazador. "¿Cazador? Oh no. Sólo hay uno y ese soy yo. (Risas). Lo que si puedo asegurarte es que habrán muy pocos Gutiérrez. Es más, sólo habrá uno en toda la MLB por muchos años". Ambos le temen al "Rey"... Lo dos han enfrentado a Félix Hernández durante su carrera, pero a pesar de la basta experiencia que alguno de ellos puede tener, a ninguno le gusta enfrentarse a él. "This guy is Nasty (este chico es repugnante)", menciona Hunter acerca del accionar de Hernández en la lomita. "Sólo tiene 24 años, es un niño y es capaz de dejarte con el bate preparado. Tú no te das cuenta de lo que pasa hasta que el umpire te canta el tercer strike o te ves corriendo sin ningún fin a la base después de pobre rolling a segunda", apunta. Por su parte, Jones no desea verlo más hasta terminar su carrera. "Pienso que me pueden quedar unos cinco años más jugando al béisbol. En esos años espero no verlo nunca más. Los lanzamientos se le mueven hacia todos lados y tú no sabes que hacer", comenta Andruw. "Debes prepararte para para tratar de hacerle contacto. Tú no sabes hacia donde dirigirle nada, así que le tiras y listo", agrega Hunter. Jones aún no ha podido celebrarle un imparable al criollo en tres turnos en los que lo ha enfrentado. Hunter, ha tenido más satisfacciones al dispararle 10 indiscutibles en 33 viajes al plato. Pero ambos jardineros llegan a la misma conclusión: "Será uno de los grandes en este negocio". Publicado en el periódico Mi Diario de Maracaibo el 27 de abril. Ampliado especialmente para este espacio.

23 abril, 2010

¿Se terminaron los tiempos de "Explosión" del Zambrano?

Zambrano está ganando su primera batalla con sus monstruos del pasado. El miércoles un anuncio del mánager de los Cachorros de Chicago, Lou Piniella, puso de cabeza a todos los seguidores del béisbol de las Grandes Ligas. Su as, su principal arma en el montículo, su hombre de confianza para abrir la temporada, su "Caballo de Hierro" en la lomita, fue bajado al bullpen. Las razones podrán sobrar. La efectividad de sus relevistas no es la mejor, colocándose en 7.30 producto de 31 carreras limpias en 38.2 episodios trabajados. Seis de las diez derrotas del equipo parten de su relevo, y en conjunto, promedian para una efectividad de 4.24, la novena más alta de la Liga Nacional (16 equipos). De todo ese grupo destaca Carlos Marmol con 1.17 de efectividad y tres encuentros salvados en siete participaciones con los oseznos. El mánager Lou Piniella discutió sus razones con la prensa: "Es por sus pitcheos. Ahora vamos a tener más garantías al final de un juego", explicó, pero también recalcó que: "Ninguno de los abridores tiene su puesto seguro, cualquiera puede ir al bullpen". ¿Es una medida disciplinaria para el "Toro"? No. El llamado de atención es para todo el equipo. Los movimientos dentro del roster pueden venir de un sólo golpe y sin previo aviso, tal cual lo dicen los contratos con las letras pequeñas, o las ofertas en los encartes. Su puesto será ocupado por su compañero Ted Lilly, quien está por regresar de la lista de lesionados. Pero de todo esto, lo más rescatable e importante es la actitud de Carlos Zambrano, sobre todo conociendo el historial de mala conducta y de fuerte temperamento. La "Gran Z", como es mejor conocido en las Mayores, tomó con serenidad y responsabilidad el asunto De hecho, se mostró comprometido con su nueva labor. “Regresaré a la rotación, Piniella me dijo que cuando el equipo consiga un hombre que se encargue del puesto de set up, me devolverán”, explicó el de Puerto Cabello a la prensa estadounidense. “No quiero ser relevista, eso no me gusta, pero sí deseo ayudar al club donde me necesiten”. Esto debería llamar fuertemente la atención. Esta temporada era de retos y compromisos para Zambrano. Viene de una lesión en su espalda y de poner los peores números de su carrera, desde que se volvió abridor a tiempo completo con el equipo de los Cachorros. El mismo comentó que su cambio para esta campaña formaba parte de un compromiso personal con muchas personas. "Debí cambiar la forma de manejar las cosas por dignidad y honor. Estoy en deuda con la organización y con la fanaticada de los Cachorros. No me gusta recordar el pasado, pero lo del año pasado (2009) fue desastroso”. Pongámonos en esta situación sin ánimos a denigrar a nadie, mucho menos a los colegas. Muchos de los periodistas comienzan sus carreras como "toderos". Llevando cables, cámaras, micrófonos y hasta choferes, hasta recibir una oportunidad para mostrar la cualidad que mejor posean, bien sea para hablar delante de un cámara o redactando para un importante periódico. Después de muchas notas, recibes el "Estatus" que siempre quisiste. El de un analista deportivo - en nuestro caso- redactando para un reconocido periódico con un sueldo que realmente brinda la tranquilidad necesaria para mantener a tu familia. De repente, te llama tu jefe de prensa y te dice: "Te vas a cargar cables de nuevo porque la persona que tenía no me sirve. Deja caer los cables, se ensucian, se pegan y se queman. La transmisión sale espantosa y estamos perdiendo audiencia. Quédate tranquilo, mantendras tu sueldo de cuatro o cinco cifras". Aja, ¿Y ahora? Muchos pensarán lo siguiente: "No perderé dinero y tendré menos trabajo. Me quedaré callado y si me dejan allí, perfecto". Actitud irresponsable. Trabajaste demasiado como para dejar de hacer lo que tanto soñaste para ponerte al nivel de otros y no tratar de mejorar. Otros pensaremos de la siguiente manera: "Sí es por el bien de la organización, perfecto. Lo haré, pero ojo. Quiero estar de regreso a mi puesto cuando lleguen los playoffs. Me encanta redactar y no perderé el chance de analizar a los ocho equipos con chance para titularse", en pocas palabras, no se mal acostumbren. La misma situación, vive "El Toro". Con un sueldo que se cerca a los 18 millones de dólares, no debe ser sencillo tener que trabajar como un simple relevista, teniendo la calidad para poder abrir encuentros importantes y echarse el equipo en la espalda durante todo un encuentro. La preparación será distinta en cierta manera, ya no deberá concentrarse para enfrentar a una gran cantidad de bateadores, sino centrarse en tener que ir y sacar del paso a unos tres, cuando mucho. insisto, acá lo importante es lo mostrado mentalmente. De hecho, ya hizo el trabajo inicial que es aceptar lo que le fue encomendado. Zambrano comentó recientemente para este espacio que: “Estoy aprendiendo a manejar mi temperamento, mi carácter en el terreno. Eso es muy distinto a la agresividad. La agresividad siempre está ahí, nunca se pierde, mi hermano. Son dos cosas distintas y eso me va a ayudar mucho este año". Esta vez no hubo pataleos. No hubo golpes a los termos. No insultó a nadie ni destrozó el clubhouse. No buscó a los compañeros que cometieron errores para que el tuviera que trabajar más durante sus primeras presentaciones, ni mucho menos a los bateadores que no lo pudieron respaldar. Su forma de actuar, hasta ahora, ha sido la de un profesional entregado a su equipo y la camiseta, reconociendo que, para poder lanzar nuevamente en su rol para los playoffs deben pasar todos los obstáculos que se pondrán en el frente en los más de 145 juegos que le restan al equipo. Ahora, esa agresividad de la que tanto habla deberá empleada de inmediato cuando Lou Piniella lo llame para prepararle el terreno a su tocayo Marmol y brindarle una opción de victoria a sus compañeros. Si lo hace bien o mal, no lo sabemos. Lo destacable, es que sus desagradables encuentros con la ira han desaparecido... Por los momentos. Bien lo comentó un seguidor a través del twitter neLsOn2k10: no sabemos que estara pensando realmente en su cabeza ante semejante e ilógico cambio. Sí, pero lo mejor fue lo que mostró. ¡Suerte pues!

20 abril, 2010

"Sandoval tiene un valor ilimitado"

Felipe Rojas Alou recuerda con cariño su pasantía por Venezuela El béisbol venezolano guarda gratos y bonitos recuerdos para la mayoría de los extranjeros que han pisado nuestra tierra, buscando cumplir un sueño. El nivel de nuestra pelota representa un gran trampolín para todos aquellos que desean llegar al estatus más grande para un jugador, las Grandes Ligas, aparte de una ardua preparación que implica esfuerzo y dedicación. Pero no sólo los jugadores tienen dicha oportunidad. Los técnicos también han venido a nuestra patria para prepararse en el mundo del coacheo, donde ya varios han llegado a dirigir en los equipos grandes, entre ellos, Pete Mackanin, quien cumple funciones con los Filis de Filadelfia como coach de banca, al lado de Charlie Manuel. O el mismo John Russell, alto jerarca de los Piratas de Pittsburgh junto con los criollos Mike Sandoval y Heberto Andrade. Ambos, estuvieron en Venezuela dirigiendo a las Águilas del Zulia. Junto con ellos, muchos más que han intentando mantener esa chispa de jugador que tuvieron cuando chamos y, debido al importante aporte que tienen nuestras ligas, se interesan en aprender de la picardía del resto de los estrategas que dirigen en suelo patrio. Uno de esos personajes fue Felipe Rojas Alou, quien no sólo pisó Venezuela para triunfar como técnico, sino también para arrastrar con él a otros criollos a nivel profesional, hacia el estrellato. El nacido en Haina, República Dominicana, quién cumplirá 75 años el próximo 12 de mayo,habló con Mi Diario, en Glendale, sede de los Gigantes de San Francisco en el Spring Training, mucho después de una carrera profesional, como dirigente exitoso con los Expos de Montreal y los Gigantes de san Francisco. Allí tuvo un respetable récord de 1033 victorias por 1021 derrotas, y ganarse, en 1994, el premio al Mánager del Año con la organización canadiense. ¿Cómo comenzó su transitar en Venezuela? -Yo llegué a Venezuela en 1977 para dirigir a los Leones del Caracas. Allí comencé mi carrera como mánager. Era mi primera vez dirigiendo en la pelota invernal, donde casualmente también había iniciado en doble A. Fue muy interesante ya que eran muy pocos los que teníamos la oportunidad de dirigir en Venezuela, sin pasar por el nivel de Ligas Menores. Por eso, yo le agradezco mucho a los Leones y al pueblo de Venezuela por esa bonita oportunidad. Teníamos un gran equipo con jugadores de gran valía y eso ayudó a ser exitosos y que mi carrera comenzara bien. ¿Le fue bien en esos años? ¡Claro! Esa primera temporada ganamos de punta a punta el campeonato. De hecho, uno de las joyas más importantes que tengo en mi oficina es un anillo que me regaló Oscar “El Negro” Prieto que dice: “De punta a punta”, en mención a la extraordinaria temporada que tuvimos. Ese año fue extraordinario. Después dirigí al Magallanes (Navegantes), con quien tuve otra gran experiencia, no muy buena, ya que sólo fui una vez a playoffs. Pero tengo la satisfacción y el orgullo de decir que soy de los pocos que tuvo el privilegio de entrenar a los "Eternos Rivales". ¿Recuerda a los jugadores que dirigió en aquel entonces? Sí. Recuerdo que con nosotros estuvo Baudilio Díaz, Antonio Armas, Jesús Marcano Trillo, Pablo Torrealba, Luis Peñalver y Wilibaldo Quintana, También estaban naciendo jugadores como Leonardo Hernández y Andrés Galarraga. Casi nada pues. Eramos muy unidos y casi invencibles. ¡Oh, que grandes eramos muchacho! (risas). Usted prácticamente descubrió a Andrés Galarraga, ¿Qué fue lo que vio en él? -A mí me lo recomendó Francisco Rivero. Me dijo que tenía un muchacho que esta gordito, pero tiene una gran agilidad y puede batear y está jovencito. Lo único que no me gustó fue que me dijo era gordito. Cuando lo vi, estaba gordote (risas). Pero aún así mostró gran agilidad, manos muy buenas, brazos muy buenos, corría y gran poder al bate, todo es su primera práctica. Así que por medio de mi organización en aquel tiempo (Expos de Montreal) lo firmamos, a pesar de que ellos se pusieron con cosas, que sí estaba gordo, que no corría. Sin embargo, estuvo unos meses esperando hasta que finalmente lo firmamos. ¿Fue injusto que ‘El Gato’ no entrara al Salón de Fama después de todo lo que alcanzó? -Esos son los procedimientos que hay hoy en día, cosas por las cuales me preocupo mucho. Pero tu cuando tienes tiempo en el béisbol sabes quien es un hombre de Salón de la Fama, y él, definitivamente, es un hombre de allí. Tarde o temprano él va a entrar. Sólo espero estar vivo cuando eso ocurra. Él es otra de las bonitas historias de jugadores latinoamericanos que no se ven tan bien físicamente, pero que son mentalmente sanos y con gran manejo de sus condiciones y, por sobre todas esas cosas, un gran hombre. Un Salón de la Fama. A usted como que lo persiguen los jugadores "pesaítos". ¿Qué tal la experiencia con Pablo Sandoval? -Yo a él (Pablo) lo veo como a un hijo, ya que después de dirigir al equipo grande, tengo que ver algo con las Ligas menores. Yo ayudo a distinguir a jugadores extraordinarios. yo vi a Sandoval y llamé a mi jefe y dije "Aquí hay un jugador de Liga Mayor jugando en clase A, gordito también (risas), pero que batea a las dos manos, no se poncha, con energía y los fanáticos están enamorados de él. Juega a fuerte todos los días, De ahí pasó a Doble A allí lo vi y fue la misma cosa. De ahí pasó a MLB, donde digo yo que estará durante los próximos 15 ó 20 años. ¿Qué es lo mejor que tiene el "Kung Fu Panda"? -Él tiene tantas cosas buenas que es difícil conseguir una en especial. lo principal que Pablo tiene es que batea. Él siempre lo ha hecho y, lo mejor, a las dos manos. En este negocio eso es importante. Lo otro que puede jugar tres posiciones muy bien, y no le molesta. Puede jugar tercera base y lo va a hacer bien. Le vas a decir que juegue primera, y lo hará bien. Lo vas a poner a quechar, y lo hará bien. Su energía es tal que le permite tomar un buen turno en el primer ininnig y en el noveno será mucho mejor. Es muy difícil conseguir gente como él. Pablo nos salvó a todos el año pasado de una situación muy difícil. Entre tú y yo, nos salvó el pellejo a todos en la organización (risas). Para usted, ¿Cuánto vale Pablo Sandoval? -Yo no sé. Yo puedo asegurar que él será una gran estrella. Él debe pasar primero por los procedimentos de agencia libre, o que si le daremos contratos largos. Por ejemplo, ahí está el caso de Tim Lincecum, quien es un fenómeno, así como lo es Pablo bateando. Yo ahorita no podría decir cuanto es el tope salarial de un jugador como él, por lo que, para mí, será ilimitado su valor en las Mayores. Además, no sólo vale eso como jugador sino como persona. Es carismático, responsable. Puedes conseguir grandes peloteros, pero que les cuesta ponerse en contacto con la gente y él, es todo lo contrario. Estuvo dirigiendo en las Ligas Invernales y su hijo (Moises Alou) gerencia a un equipo, campeón de la Serie del Caribe ¿Es necesario jugar en invierno para llegar a las Mayores? -Hace poco nos reunimos cuatro leyendas del Salón de la Fama. Willie Mays, Orlando Cepeda, Gaylord Perry y Willie McCovey, junto con Will Clark, Jim Davemport y yo mismo. Los cuatro del Salón de la Fama tienen algo en común, que fue que jugaron en Liga Invernales. Mays destrozó la Serie del Caribe, Perry jugó dos años en República Dominicana y así... Entre otros estamos unos como Juan Marichal y yo que jugamos más de 15 años. Marichal teminó con casi 50 juegos completos en el Invierno, donde jugaba casi siempre. A Mays siempre le preguntaron que como hacía para estar en forma, ya que antes no habían tantas pesas y el respondió que jugaba en invierno. Ojalá y la gente entendiera que es necesario jugar todo el tiempo. Ahí está Pablo, 'Ready' para jugar pelota. ¿Quién es para usted el jugador más importante que tiene Venezuela? - Me pones en aprietos muchacho (risas). Debo nombrarte a Luis Aparicio porque jugué con él y lo conozco. De los nuevo, tengo que decir que Miguel Cabrera es un tremendo pelotero. Yo que el problema del año pasado fue cosa de jóvenes. Pero el habló como un hombre y creo en su palabra. Él tiene que demostrar todo lo que tiene porque hay una deuda que Miguel debe pagar, y es demostrar que esta hecho para jugar. A Carlos González, ¿Lo conoce? -Claro, ese es otro gran pelotero. No he podido verlo mucho, pero se hablan muchas cosas buenas de él. Este año será importante para él ya que será su primera temporada desde el inicio. Se que puede correr, batear y con una defensa extraordinaria. Ojalá ese gran pelotero estuviera con nosotros y que terminaramos de desarrollarlo aquí.

11 abril, 2010

"Quiero traerme cien carreras"

José Celestino López quiere ser el camión de remolque del equipo naviero esta temporada. (Peoria, Arizona.-)Los Marineros de Seattle han tenido grandes infielders en su historia. Podrían nombrarse súper estrellas como Omar Vizquel, Alex Rodríguez, Bret Boone, John Olerud y hasta Adrián Beltré, por traer de la memoria los más recordados de las dos últimas décadas. Todos ellos fueron conocidos por defender en excelente forma al menos una de las cuatro posiciones del cuadro de los navieros. Casi todos ellos ganaron Guantes de Oro en su estadía con Seattle. El único que se sale de esa clase es Alex Rodríguez, quien ganó sus dos únicos premios a la defensiva en el 2002 y 2003, pero con los Rangers de Texas. Si los enumeramos, acumulan 6: Vizquel ganó el primero de sus once en el 2003, curiosamente el último año que estuvo con ellos defendiendo el campocorto. Bret Boone se llevó tres como cuidador de la seguna almohadilla. John Olerud, siempre recordado por salir a cubrir la primera base con un casco, obtuvo sus tres únicas manoplas doradas defendiendo la inicial de los navieros.

José Celestino López se ha colado en ese grupo. Sin tener una posición fija en el diamante logró cuidarlas todas a capa y espada, así no le agrade mucho el asunto y no haya sido galardonado por su trabajo en la defensa . “A veces puede que uno se moleste, pero a decir verdad nunca he tenido problemas con los cambios ni me he molestado. Mientras este jugando estaré tranquilo”, cuenta para Mi Diario, en Peoria, donde se puso a tono junto con los Marineros en el Spring Training.

“El cambio a la tercera base no me ha pegado. Me siento súper bien allí. La única diferencia es que los roletazos llegan más rápidos y debo correr mucho más hacia adelante”. Este año, tuvo que ser movido a la esquina caliente gracias a la llegada del versátil Chone Figgins, proveniente desde los Angelinos de Los Ángeles-Anaheim. El criollo no se enrolló mucho con el asunto. Al contrario, le anima porque agregan más calidad al equipo. "Figgins será de gran ayuda. Tiene velocidad, agarra muchas bases por bolas, batea .300 es capaz de tocar la bola con hombre en segunda y embasarse. Su juego es explosivo ya que viene de una escuela como la de Mike Sciocia. Batea, es rápido, toca la bola, tiene poder. Sabe como jugar para el equipo. Tiene esa chispa para jugar la pelota rápida y eso me gusta mucho”, explica el larense.

Su trabajo fue extra a lo largo de los entrenamientos. "Uno en el Spring Training cuando es regular no juega mucho. Lo necesario para mantenerse en forma y estar haciendo los ejercicios. Por ejemplo, cuando no tengo juego me quedo 30 ó 40 minutos más agarrando rollings para mantenerme activo todo el tiempo. Del resto es meterle el brazo", apunta.

López obtuvo grandes números personales en la temporada pasada, dígitos que lo colocaron entre los grandes de las Mayores y de la misma organización. Su fuerte siempre ha sido el madero y eso lo demostró al ser líder en dobles (42) y remolcadas (96), segundo en jonrones (25) e imparables conectados (167) y ser tercero en slugging (.463).

Sin embargo, López ambiciona y buscará en el 2010 poner números redondos y topes en su corta carrera de poco más de cuatro años. “Si bateo de .280 en adelante estoy bien porque pienso que un promedio decente. Lo que si quiero es batear 30 jonrones y 100 remolcadas”. La meta de los .300 no es difícil, sólo que la posición en el lineup puede restarle muchas veces el tipo de swing que deba hacer. "En el spring training me han puesto entre el tercer y sexto bate donde puedo conseguir mucha más gente en base y, la mayoría de las veces, tengo que hacer turnos productivos para buscar un fly de sacrificio o mover a mis compañero", argumenta el toletero. Los apenas 23 encuentros donde pudo estar de cuarto o quinto en la alineación ligó para .359 (33 hits en 92 viajes al plato) con 12 anotadas, 7 dobles, 7 palos de vuelta completa, 26 remolcadas y un grande .663 slugging.

Traerse la centena de carreras no será tan difícil, ya que tendrá por delante de él a gente de contacto como Ichiro Suzuki, Figgins y posiblemente a su compatriota Franklin Gutiérrez. Lo curioso es que no se enfrasca en lograr la meta de los .300 puntos en el promedio.

López no quiso meterse en camisa de once balas asegurando que Seattle pueda llegar a la postemporada. Está conciente que el equipo no es sólo él y que tiene 24 compañeros más para hacer la primera gran parte del trabajo. Lo que si garantiza es que tienen material con que poder pelearle al resto. "Hay que ir juego a juego en la temporada. Ahora tenemos una llavecita más con la llegada de Cliff Lee, algo súper importante, ya que hay equipos como los Yankees que tienen como cinco o seis. Esa dupla entre (Félix) Hernández y (Cliff) Lee podrá ayudarnos mucho. No puedo decir que pasaremos, ni tampoco que los Angelinos o Atléticos lo van a hacer. Lo que si ´diré es que daremos la pelea, a quien sea".

10 abril, 2010

"Soy el Franklin que fui en las Menores"

Llegar a Seattle le dio a "El Guti" la paz y tranquilidad que buscaba en las Mayores.
(Peoria, Arizona.-)
Franklin Gutiérrez comenzó su carrera con los Indios de Cleveland en 2005, después de pasar cuatro años en las menores de Los Dodgers de Los Ángeles y ser cambiado, junto con Andrew Bronw, por Milton Bradley, en abril del 2004. Después de cuatro temporadas en las Mayores con Cleveland, fue enviado a Seattle en un cambio que involucró a tres equipos y a tres criollos, (Luis Valbuena, Endy Chávez y Ezequiel Carrera), metiéndose en el cambalache los Mets de Nueva York. El año pasado, tuvo su zafra más importante y, lo mejor, encontró un hogar donde poder demostrar que tiene grandes dotes para jugar a diario y ser considerado uno de los mejores jardineros de las Grandes Ligas. “Estoy muy contento con la oportunidad que me brindó el equipo el año pasado y la que tendré por los próximos cuatro años”, expresó “El Guti”, en Peoria, sede de los Marineros de Seattle en el Spring Training. Franklin estampó su firma en enero para jugar con los navieros desde el 2010 hasta el 2013, con una opción del equipo para jugar en 2014 por 20.5 millones de dólares, cosa que relaja al jardinero capitalino. “Cuando llegas a este nivel buscas estabilizarte”, explica. “Considero que era lo que buscaba cuando discutieron mi agente y el equipo mi contrato. Ellos estuvieron muy contentos con mi trabajo. A mi me encanta la ciudad y la comodidad que te brinda la gente de Seattle. Con todo esto, siento que alcancé ser el Franklin que era en las menores para jugar al béisbol”. Gutiérrez siempre fue conocido en las menores como un jardinero de lujo, siendo considerado el 4to. mejor prospecto outfielder por Sportsticker en el 2003 así como el 4to. mejor prospecto de los Dodgers de Los Ángeles, según la revista Baseball America. También, en su estadía con los Indios, fue considerado el cuarto mejor del equipo en la temporada 2005. Estuvo muy cerca de obtener un nuevo Guante de Oro para Venezuela en los jardines cuando peleó codo a codo con Adam Jones, y que al final se quedara el norteamericano. Una de sus tareas en poder cumplir esa labor, pero no se parte el coco tratando de enfatizarse en eso.
“No negaré que quisiera ganarme un Guante de Oro, pero no lo voy a buscar. El tiene que venir solo, trabajando y divirtiéndome en los jardines”. ¿Divertirte? ¿Cómo lo logras?, preguntamos. "Trabajando", recalca. "La gente piensa que cuando decimos divertirnos significa dejar a un lado la disciplina y la seriedad en el campo. Eso no es así. Para mi es ir a buscar todas y cada una de las pelotas que batean. Por ejemplo, en las prácticas, le corro a todas las pelotas con el simple fin de tratar de alcanzar. Eso significa para mi divertirme. Tratar de agarrar las pelotas que pueda". Modesto el muchacho que atrapó cualquier cantidad de pelotas y salvó cerca de 30 carreras en la temporada para el equipo.
Chamo estudioso...
El capitalino luce más modesto de lo que se ve. Su calmada forma de hablar y expresar las ideas, así como la paciencia para atender a todos por igual muestra que posiblemente tuvo una buena educación tanto en su hogar como en sus estudios. Pero eso no sólo lo dejó para el trato con las personas, sino también en su juego, donde se empeña en sacarle punta a la mínima estadística de los rivales que le toca enfrentar.
“Cuando quieres ser exitoso hay que trabajar fuerte. Trato de saber hacia donde batea más, a que pitcheos le hace swing en determinados momentos del juego o conteos. Estar en el center field te ayuda a ver donde se ubica el catcher para ubicarme según su posición". Claro está, no toda su carrera se ha guiado por estas estadísticas. Su principal arma, el instinto. "Este tipo de cosas puedes hacerlas cuando llegas a un nivel como este. Hay mucha más gente trabajando en función de eso. En las menores actúas más por instinto y conocimiento de lo que crees que puedes hacer", explica.
Esta temporada Franklin se compromete a mejorar mucho más algunos aspectos de juego, pero sin ponerse en la espalda presión extra, menos cuando el equipo le brinda a sus anchas la confianza necesaria para hacer su juego alegre y divertido. "No voy a ponerme presión de ningún tipo. Si puedo poner los mismos números del año pasado estaré satisfecho porque considero que fueron buenos números. Ellos (el equipo) no me presionaron mucho acerca de mi ofensiva. Pero si quiero mejorar el porcentaje de embasado y robar muchas más bases". ¿Jonrones? "No pienso en ellos. Que salgan los que tengan que salir".
El año pasado puso los números más altos de su carrera disparando 18 cuadrangulares y remolcando 70 rayitas. "Muchas de esas cosas dependerán del puesto que tenga en la alineación". En los primeros encuentros el mánager de los Marineros, Don Wakamatsu, mantiene a Gutiérrez entre el tercer y séptimo puesto en la alineación, buscando aprovechar el alto porcentaje de embasado de Ichiro Suzuki y Chone Figgins, y la capacidad remolcadora de su compatriota josé Celestino López, esperando a ver que puede hacer Milton Bradley como cuarto bate del conjunto.
Guti es el cuarto bate del equipo...
“Franklin es muy querido en Seattle”, nos comenta Fernando Alcalá, asistente de información del equipo naviero. “Hay que ser muy bueno para ser tan querido como lo hizo él (Franklin)", relata Fernando, quien nació en Arizona y esta cumpliendo su sexta temporada al servicio del equipo marinero.
Gutiérrez demostró que puede hacer todo en el centro de los jardines. Tiene alcance, buena reacción, buen brazo y buen bate, a pesar de los .284 de promedio, y un porcentaje de embasado de .339. Todos números base en su corta carrera.
A pesar de ello, el jardinero de los Leones del Caracas en la liga venezolana supo meterse en el bolsillo a los seguidores de los navieros. “Cuando tienes en un equipo a personajes como Ichiro Suzuki, un brazo como el de Félix Hernández y a un futuro Salón de la Fama como Ken Griffey Jr., debería ser difícil figurar por encima de lo que ellos han hecho por el equipo”.
“Gutiérrez enamoró a todos con su paciencia y eficacia al momento de hacer las jugadas, su amabilidad al momento de atender a los fanáticos y su entrega al momento salir a jugar. Por eso ocupa el cuarto puesto entre los jugadores más populares de todo el equipo”, y no es para menos. ‘El Guti’ esta detrás del “Rey” Hernández, del ‘Junior.’ Griffey y el futuro inmortal Ichiro Suzuki.
Definitivamente estar en ese puesto tiene que ser un honor para el capitalino. No es fácil superar a un bate con más de 600 jonrones, a uno con nueve campañas bateando más de 200 imparables y al lanzador estrellas de los Marineros por las próximas cinco temporadas. ¡Suerte pues!

09 abril, 2010

"Yo sólo le tiro y pa´donde salga"

Callaspo sólo le queda por afianzar que lo del año pasado no fue casualidad.
(Maryvale, Arizona.-)
La temporada 2009 fue de revelación para Alberto Callaspo, quien se fajó durante 155 encuentros para demostrar que de verdad podía con la responsabilidad de jugar a diario en las Mayores. “Eso es producto del esfuerzo. Yo sabía que si me daban chance para jugar a diario iba a demostrarles que podía batear aquí. La defensa siempre ha estado”, comentó para Mi Diario el ahora tercera base de los Reales de Kansas City.
Callaspo fue firmado por los Angelinos de Los Ángeles de Anaheim en el 2001, y cinco años más tarde debutó con los Cascabeles de Arizona, donde jugó hasta el 2007, para en el 2008 llegar al equipo azul. “Yo sólo esperaba el chance”, comenta antes de su encuentro contra los Cerveceros de Milwaukee en Maryvale, Arizona. “Pero bueno, llegué y ahora sólo me queda seguir trabajando como lo he hecho siempre”.
Callaspo defendió la segunda base para el equipo durante 192 encuentros (46 en el 2008 y 146 en el 2009). El año pasado impuso marcas personales importantes que lo ubican en la historia del club. Pero este año el equipo tiene un nuevo plan con él y es mudarlo a la tercera base, lugar que sólo ha jugado 35 veces en las Grandes Ligas y 26 en las menores. “No se me hace muy difícil jugar allí”, relata el infielder. “Tenemos que esperar que empiece la temporada para ver qué es lo que quiere hacer el mánager conmigo. De todos modos no se me hace nada difícil porque en Venezuela he jugado tercera base y aquí también varios encuentros”.
Callaspo no se entra a pasiones y tampoco se “Rompe el Coco” tratando de pensar que hacer y que no. “Yo mientras tenga mi puesto en el lineup no me importa donde vaya a jugar. Esto es lo que se hacer desde chamo y es lo que quiero terminar de hacer hasta que no me den más las piernas, como dicen por ahí”. Acerca de su equipo, Callaspo le ve buenos movimientos. “Estamos trabajando en la defensa”, dice mientras se le bromea diciéndole que será capitaneada por él. “Este equipo es muy joven. Si hacemos nuestro trabajo, podremos dar dolores de cabeza a varios equipos de la división. Tenemos al mejor lanzador de la Americana y tenemos gente de experiencia para tratar de meternos en la pelea".
Una maquinita de bateo...
Lo primero que Alberto hace es ponerse a batear. “Es lo que más me gusta desde chamito. No sé como lo hago, no lo sé explicar, sólo sé que veo la pelota y le hago swing. Pa’ donde salga va ella y yo corro por otro". (Risas).
Muestra de ellos es haberse situado en el tercer puesto de todos los tiempos dentro del club con extra bases (54), en dobles (36) y triples (7). En cuadrangulares, con 11, se ubicó en el quinto lugar. Todos esto, detrás de personajes como Jose Offerman. En la temporada fue octavo en triples con cinco y terminó disparando para .300. "No puedo explicar porque se me hace tan fácil. Sólo me paro en el home, veo la pelota como me enseñaron cuando era chamito y empiezo a hacer swing a las pelotas que me gusten. Me siento cómodo y grande en la caja de bateo".
Alberto tuvo el chance de ver de cerca a su compañero de equipo en las Águilas del Zulia, Ernesto Mejías. El primera base llegó como invitado al campamento de los Reales, después de haber tenido las anteriores en las Ligas Menores de los Bravos de Atlanta. "A Ernesto le fue muy bien. Casi no podía verlo porque yo salía muy rápido de los juegos pero le di par de consejitos. ¿Qué le dijiste mijo? Qué se pusiera las pilas y que no le parara a lo que dicen por ahí. El sabe lo que tiene y es capaz. Qué le echara mano al asunto para que pudiera subir rápido”.
Acerca de las Águilas el maracayero comentó que las cosas están muy bien. En febrero, el infielder se quejó con la gerencia por no haberle cancelado unos días de permiso que pidió en mitad de la postemporada, para poder viajar a los Estados unidos y participar en el Fan Fest de los Reales, donde además recibió el premio Especial al Logro, Joe Burke, votado por la Asociación Americana de Escritores de Béisbol (BBWAA, por su siglas en inglés).
“Ya las cosas se han ido enderezando. No me han dicho nada aún, pero yo creo que todo se va a arreglar. Vamos a esperar que llegue allá a ver qué es lo que es”. Jorge Urribarrí, gerente deportivo del club rapaz, afirmó el pasado viernes 9 de abril que "Callaspo es y seguirá siendo aguilucho". También desmintió cualquier rumor acerca de un cambio con el equipo de los Navegantes del Magallanes.

04 abril, 2010

"Soy hombre de ganar más de 13 juegos en un año"

Carlos Zambrano se siente en deuda con el equipo de los Cachorros de Chicago y este año quiere pagarles con entrega y muchas victorias .

(Mesa, Arizona.-)La temporada del 2009 simplemente fue de aprendizaje para Carlos Zambrano y la tomará como compromiso para la del 2010. El lanzador derecho de los Cachorros de Chicago tuvo su peor zafra en las Mayores desde que se hizo lanzador a tiempo completo del equipo en el 2003 y de la zafra de apenas 13 ganados ese mismo año. Para eso, Zambrano ha trabajado en su actitud dentro y fuera del terreno. Las razones van mucho más allá de evitarse problemas con otros jugadores o evitar salir expulsado de un encuentro. Mucho menos dejar de discutir. Él mismo las explica:

“Debí cambiar la forma de manejar las cosas por dignidad y honor. Estoy en deuda con la organización y con la fanaticada de los Cachorros. No me gusta recordar el pasado, pero lo del año pasado (2009) fue desastrozo”, confesó “El Toro” para Mi Diario, después de su salida el 26 de marzo ante una escuadra de los Atléticos de Oakland, donde trabajó por espacio de seis episodios, permitiendo tres imparables, dos carreras (una limpia) dando un boleto, ponchando a seis y golpeando a un bateador.

“La temporada del año pasado quiero olvidarla. Soy hombre al que Dios le dio un don especial para jugar al béisbol. Modestia aparte no soy un pitcher de nueve ganados y debo aprovechar las condiciones que Dios me ha dado para jugar al béisbol. El equipo necesita que Carlos Zambrano y el resto del equipo tenga una buena temporada”.

Zambrano conoce lo que es capaz de hacer y para ello trabajó duro durante todo el receso. “Yo puedo ganar más de 13 juegos en una temporada. Pero lo más importante para mí y para todos es poder mantenerme sano”. Para lograr esas cosas Carlos tuvo que someterse a un tratamiento especial para poder estar fuerte.

“Me he mentalizado para venir en mejor forma. Me he concentrado en las zonas afectadas por la lesión como la espalda y el abdomen junto con mis piernas. Me siento más fuerte e hice más abdominales para así estar en plenitud de condiciones". El oriundo de Puerto Cabello también cerró un poco el pico, ya que al parecer le gustaba husmear la cocina cuando todos dormían. "Deje las comidas de noches para sentirme más saludable. Así eliminé los carbohidratos”, aseguró el criollo quien en 2007 alcanzara 18 victorias, máxima cantidad de ganados en su carrera.

Lo más importante en todo esto es el trabajo mental que realiza para encarar el 2010, asegura y enfatiza que ahora maneja todo de mejor manera; todo menos la agresividad para salir a jugar. “Estoy aprendiendo a manejar mi temperamento, mi carácter en el terreno. Eso es muy distinto a la agresividad. La agresividad siempre está ahí, nunca se pierde, mi hermano. Son dos cosas distintas y eso me va a ayudar mucho este año”.

Y eso se notó en el campo. Ese viernes, un error permitió que le anotaran una carrera. Se molestó, pero sin pataleos. Respiró profundo y se monto en la lomita a tomar las cosas por sus propias manos. “Eso lo he puesto en práctica en el Spring Training y, les aseguro, que es lo que verán en la temporada. Esta vez reaccioné como cualquier ser humano que se molesta con algo, pero controlé la situación. Ahí está la diferencia”.

El tema de la agresividad sale por un comentario chistoso de Pablo Sandoval donde alaba la calidad del derecho, uno de los lanzadores más difíciles que le ha tocado enfrentar, y al que curiosamente logró conectarle un jonrón con las bases llenas el 10 de marzo. “Nosotros siempre estábamos bromeando acerca de esas cosas. Que un día le iba a dar un palo, y ahora le pude dar uno bien largo”. Zambrano, quien admira al slugger de los Gigantes de San Francisco, respondió: "Ya veremos cuando nos veamos en la temporada regular. Acá nada se vale", con tono retador, pero manteniendo el buen humor de la anécdota.

El mismo Lou Piniella reconoce la mejoría del derecho. “Se ha visto muy bien. Eso es lo que esperamos de él. Que se mantenga enfocado en el juego”. Acerca de las visitas al psicólogo no quiso meterse mucho en el tema, pero asegura que se ven los cambios.

Las dietas no han disminuido la fuerza en los pitcheos del Carabobeño mostrando que su recta ya está en plenitud de condiciones, acompañado de un nuevo lanzamiento en su repertorio, el cual confía lo ayudará a dominar más a los bateadores.

"Lo de la recta llegó en un momento donde la rehabilitación estaba en su parte más importante. Es algo normal entre los lanzadores. Es algo que se conoce como "dead arm" (brazo muerto) y el brazo comienza a mostrar señas de mejoría", explicó el renovado Zambrano. Acerca de sus nuevas herramientas dijo: "Este año trabajaré más con el sinker, eliminando la recta cortada. Así pondré a los bateadores a conectar más rollings y no levantar la bola".

Zambrano hará esta tarde su sexta apertura en juegos inaugurales, colocándose a uno de Fergie Jenkins en el récord de aperturas. El "Toro" no ha tenido mucha suerte en este tipo de salidas ya que apenas logró obtener su primer lauro en la campaña pasada ante los Astros de Houston. Hoy, enfrentará a los Bravos de Atlanta, equipo al que venció dos veces en once aperturas arrastrando tres derrotas y 4.48 de efectividad en 68.1 tramos en lo que va de su carrera. De hecho, sus dos únicas victorias las consiguió en el 2002. En total, el criollo tiene récord de una victoria, una derrota y tres salidas sin decisión en 'Opening Days'.

02 abril, 2010

"Sólo quiero ganar la Serie Mundial"

Después de dietas, ejercicios, helicópteros y demás distracciones, Pablo Sandoval está listo y quiere jugar en octubre... La Serie Mundial. (Scottsdale, Arizona) Hablar y compartir con un personaje como Pablo Sandoval te tiene que dejar algo. ¿Por qué? Por la humildad, sencillez y entrega que tiene para todas las cosas que hace tanto dentro como fuera del campo: su primera y gran pasión. “Kung Fu Panda”, como es conocido en el béisbol de las Grandes Ligas, disfruta de una gran salud, un gran potencial para jugar a la pelota y un carisma único para tratar con las personas. No importa quién seas, el siempre ha demostrado disposición para hacerlo. “Uno nunca debe cambiar chamo. Tengas o no plata y fama debes seguir siendo igual que siempre. Al menos eso me enseñaron en mi casa y así pienso que deben ser las cosas”, comenta Sandoval cuando le preguntamos si el acoso de las personas no le molesta. “Lo más duro de ser pelotero es la fama”, señala el ahora tercera base de los Gigantes de San Francisco, equipo que lo tiene como una de las grandes promesas en el futuro inmediato. “Pero uno debe entenderlo. Es como si yo cuando era chamo no hubiese estado en su situación pidiendo autógrafos, pana”, dice Pablito mientras sale de la caja de bateo donde cultiva sus sueños y logros, en los campos de entrenamientos en Scottsdale, Arizona. Pablo, encantado y, como todo un niñito relatando una historia de aventuras, en las jaulas de bateo donde entrenan los Gigantes en el Spring Training, sigue su cuento: “Mira, esto es tan bonito que una vez salí a comer con mi papá, Amelia (su mamá) y mi pequeña hija, en San Francisco. Yo no había jugado ese día porque estaba enfermo. La gente cuando me vio empezó a decirme ¡Panda! ¡Panda! Es difícil dejar pasar esas cosas. Pero lo mejor, es que no me dejaron pagar la cuenta (Risas). Se siente bonito cuando te quieren”. Pablo está por los fanáticos y se debe a ellos. “Yo amo a mis fanáticos así como ellos a mí”. Y hay que estar seguro de algo, que si no lo quieren por que es rival de otro equipo, lo van a querer por lo que representa actualmente para el béisbol y el deporte: ejemplo de constancia, humildad, profesionalismo y corazón para hacer las cosas que quieres. A falta de un día para que arranque el béisbol de las Grandes Ligas, el equipo de los Gigantes de San Francisco tiene todo listo para comenzar. Mejor dicho, ya tiene a su “Arma Mortal” lista para salir al ataque “Estoy fino mi pana”, responde Sandoval cuando se le pregunta acerca de su salud. En La Bahía ya no se preocupan por su peso. Al contrario, desde octubre esta fajado para cumplirle al equipo. “Ellos están contentos con mi peso. De hecho, bajé más de lo que ellos querían”, relata Pablo, quien esta temporada no quiere demostrar nada más de lo que ha hecho desde que fue subido a las Mayores. Ahora quiere verle el fruto a su trabajo. “Quiero llegar a la Serie Mundial”, confiesa. “No quiero Guantes de Oro, ni Bates de Plata, ni Juegos de Estrellas. Quiero un anillo de campeón porque eso es lo que de verdad importa, para lo que uno trabaja y lo que realmente muestra que juegas para un equipo y que ese equipo esta unido para afrontar seis meses de temporada”. Para ello el equipo se encuentra bien armado, a opinión de “Kung Fu Panda”. “Tenemos el mejor pitcheo de las Mayores. Lincecum, Cain, Zito y Sánchez. Ahora contamos con Mark De Rosa y trajeron a un veterano como Bengie Molina. También hay veteranos como Renteria, Rowand y Uribe que podrán ayudarnos a equilibrar la juventud del equipo con la veteranía que ellos tienen”, completa el nacido en Puerto Cabello. De una esquina fuerte, a otra más caliente A Sandoval no le ha pegado el cambio a la tercera base, posición que cubrió durante casi todo el 2009 alternado con unos juegos en la inicial y otros mínimos en la receptoría, la posición que realmente le gusta a Pablo. A pesar de haber cubierto de buena manera el tercer cojín el trabajo que han realizado para poner a "Pandoval" a tono para cubrir la "esquina caliente" se ha basado en realizar más actividades físicas como lo hacen en el fútbol americano. “Estamos trabajando con las reacciones para poder salirle rápido a los batazos hacia adelante, por ejemplo. El trabajo con las pesas, abdominales y correr me tiene bien activo. Tomo muchísimos rollings hacia los lados y hacia adelante cosa que siento que comienzo a dominar cada día más”. Los porcentajes de fildeo de Pablo no muestran que deba hacer grandes ajustes para esta temporada. En 132 encuentros jugados en la antesala ha cometido 11 errores para un muy aceptable .960% de efectividad. Del bateo, ni pendiente. Pablo sigue igualito que siempre dando sus líneas tendidas, bateando hacia la banda contaria y, por supuesto, dejándola detrás de la pared en el outfield. “Me siento con más fuerza. Más rápido con el swing. Es más, estoy jugando con un bate más pesado y ni lo siento”, comenta el jugador sensación de los tejanos. A pesar de no ambicionar con títulos de bateo e impulsadas, "Pandoval" no se duerme en su intento de dejar, al menos, los mismos números que el año pasado, cuando promedió .330 de promedio, 90 carreras impulsadas y 25 cuadrangulares. Sí las cosas con su físico y habilidad para batear han mejorado como el dice, no será nada complicado que el de Puerto Cabello se monte en el potro de las 100 remolcadas y los 30 o más jonrones. Lo que más se ha vacilado el infielder del equipo de La Bahía es el Grand Slam que le conectó a Carlos Zambrano al inicio del Spring Training. “Nosotros siempre estábamos bromeando acerca de esas cosas. Que un día le iba a dar un palo, y ahora le pude dar uno bien largo”. Sin embargo, no se confía ya que es el lanzador más difícil que le ha tocado enfrentar. “Zambrano es impresionante. Se le mueven muchos los lanzamientos y no sabes con qué te puede venir en determinado momento. Este año trabajé mucho en poder concentrarme para poder conectarle más. Sí puedo batearle a él, puedo con quien sea”.

01 abril, 2010

"Sí Dios me quiere aquí es por algo"

Andrés Eloy Blanco quedó sorprendido con su cambio desde Chicago a Texas. Surprise, Arizona.- La vida del pelotero puede cambiar tan rápido como la de un juego con un sólo swing. Hoy puede estar en un lado imaginando que tiene un puesto "seguro" para jugar una temporada larga con un trabajo específico y, de pronto, verse con otro uniforme con un verdadero plan de trabajo y con más oportunidades de lucirse, mostrando los dones que la vida le dío. Así le pasó a Andrés Eloy Blanco cuando el sábado 27 de marzo recibió la noticia que debía recoger sus cosas porque se iba de Mesa , sede del campo de entrenamiento de los Cachorros de Chicago, a Surprise para unirse a los Rangers de Texas. “No me esperaba el cambio de ninguna manera”, confiesa el ahora utility de los tejanos para Mi Diario, desde su nuevo hogar, en su segundo día de práctica, el lunes 29. Blanco, quien regresó a la acción unos días atrás después de recuperarse de un tirón en la rodilla derecha que lo dejara fuera por diez días, se ha tomado el caso con seriedad y humildad. “Las cosas pasan porque tienen que pasar. Ya he aprendido que no hay puesto seguro en ningún lado y por eso debo trabajar el doble. Si Dios me mando para acá fue por algo y me enfocaré en poner lo mejor de mí, como siempre lo he hecho, para ganarme la confianza de los técnicos y compañeros de equipo”, exclamó Blanco, quien comenzó a demostrar sus dotes de gran defensor, el domingo, ante una escuadra de los Medias Blancas de Chicago luciendo a la defensiva y al bate ligando par de imparables y anotando una carrera, en cuatro turnos. “Esas cosas te motivan chamo”, confiesa Andrés, quien no ha jugado más de 60 juegos, en una misma temporada, en su carrera de cuatro años en las Mayores. “Ahora más que nunca quiero demostrar de lo que soy capaz. La lesión no me ha restado intensidad ni ganas de jugar. Sólo debo esperar mi chance y listo”. Algo si tiene seguro y es su puesto en el roster de los tejanos, quienes buscaban un utility veterano y con la versatilidad del de Urama estado Carabobo. “Son cosas que pasan y uno debe meterle ganas a las cosas. Prepararse en un séptimo u octavo inning. Uno debe concentrarse en no pensar que eres una sobra. Los más veteranos me enseñaban a prepararme y a no sentirme como algo que estaba de más en el dugout. Eso te ayuda mucho”. El puesto, lamentablemente para los criollos, le costaría a otro venezolano, Gregorio Petit, quien de la noche a la mañana fue cambiado de Oakland a Texas, y ahora con la llegada de Blanco se ve cuesta arriba su estadía en las Mayores. “Son cosas que se salen de nuestras manos. Pero Petit tiene talento para conseguir pronto su puesto en el equipo. Tal vez hasta sea por mi mismo o cualquiera de los otros del equipo. Lamentablemente, así es este negocio”. Blanco no estará sólo en el equipo, así que adaptarse no fue nada difícil en los últimos días que quedaban de Spring Training al contar con Elvis Andrus, Guillermo Moscoso, Maximiliano Ramírez, Endy Chávez y el mismo Petit. “Es una ventaja porque te hacen sentir como en casa. Ya con varios he compartido y con el resto ya es otra cosa porque sabemos que somos de Venezuela y no nos desamparamos”, relata el criollo quien la temporada pasada estuviera en 53 juegos con los Cachorros. De que vuelan vuelan... El futuro del ex-campocorto de Águilas del Zulia y ahora ficha de los Navegantes del Magallanes en la Liga Venezolana de Béisbol Profesinal pudiera ser más claro de lo que el mismo pensaba, ya que la opción de que arranque la temporada como titular y dueño de la segunda almohadilla de los tejanos suena, y con fuerza, debido a que Ian Kinsler no se ha recuparado de la lesión de su tobillo y el mismo jugador ha reconocido que no podrá estar listo para el "Vamos" del próximo lunes 5 de abril, cuando los Rangers reciban a los Azulejos de Toronto. La lesión de Kinsler podría tomarle mucho más de la semana que pronuncia la parte la médica, de hecho, el mismo jugador quiere tomarse las cosas con calma hasta estar totalmente bien. "No tengo idea. No se ha fijado fecha exacta ni tentativa. Estoy esperando a que sane. ¿Cuando será? No lo sé. Pero cuando eso pase, entonces ahí jugare", comentó el segunda al portal de MLB.com. La titularidad de Blanco está más que clara que será simbólica a pesar de que Kinsler estará afuera unas cuantas semanas, pero no tantas como para pensar en una larga espera. Pero los juegos le vendrán bien al criollo para demostrar que pueden contar con él, cuando quieran y donde quieran. "Uno jamás piensa en que un compañero tuyo se lesione. Sí lo haces, tendrán a otros cientos esperando y ligando que a tí te ocurra lo mismo. Por eso yo siempre espero que mis muchachos esten bien durante todo el año", enfatiza. "Eso sí, de que le pondré toda mi alma y corazón no pueden dudarlo. Sólo espero estar saludable para responder a la confianza del mánager Ron Washington y de los directivos del equipo". Apoyo va a tener y tal vez sea de los más fundamentales en el inicio de temporada de Andrés ya que tendrá a un pana de la liga invernal venezolana a su lado, claro para tener confianza. "Tener a Elvis como compañero en el campocorto te ayuda porque ya nos conocemos. Sabemos donde se ubica cada uno en las jugadas y como son nuestros movimientos. Eso te relaja un poco en el momento del juego porque puedes ser más natural y tranquilo al momento de hacer las jugadas". La fortuna le sonríe por unos días al venezolano. Ojalá y esa riqueza pueda brillarle durante los próximos seis meses y 162 encuentros.