24 junio, 2016

Gracias por lo enseñado, y regalado, Panorama

Finalmente tengo tiempo y mente para decir gracias a Diario Panorama como debo. ¡Gracias!  

El 14 de junio apagué el segundo computador en esta enorme empresa que me brindó la oportunidad de ejercer, aprender, desarrollar y crecer como hombre y profesional. Aquí asumí varios retos. El primero, en Mi Diario, un periódico popular con un impacto inmenso en el Zulia. ¿Me avergonzó? ¡Claro! No era el estilo que te enseñan en la escuela de comunicación. "¡La merma!" "¡CarGo es el papá de los helados!" "¡El Barcelona no suelta la teta!" "¡Bululú en el Luis Aparicio!" Todos esos titulares con 'punch' y con gran atracción. Nunca negué que me chocaba el estilo. Más tarde me dí cuenta que en la Capital un diario deportivo hablaba casi que igual y eso me disminuyó un poco lo que sentía. Sin embargo, entendí que tenía una labor y pienso que haberlo hecho, no perfecto, agradable a los lectores, me complace.

Siempre entregué lo mejor de mí en cada trabajo realizado. Me tocó darme con una piedra en el diente porque gracias a Mi Diario pude hacer que 'Gerardo Boscán Villasmil' fuera, al menos, una fuente, una referencia para el resto de los lectores, deportistas y colegas con quienes he tenido el placer de conocer, compartir y aprender.

Viajé, disfruté. Me molesté, lloré, grité y peleé por lo que siempre me pareció correcto. Nunca me arrepentiré de ninguna de mis batallas, solo de la forma que las libré, llevadas por el impulso de sentirme más útil, de hacer algo distinto. Quienes me ayudaron, quienes entorpecieron ese camino, también fueron parte importante.

En el 2014 entré a la redacción de un diario en plena planificación para su gran fiesta centenaria, Panorama. Dios y la Virgen me dieron una nueva oportunidad de asumir un reto importante, con un equipo constituido, ambicioso y celoso de sus espacios. Es lógico, entre los redactores deportivos tenemos una pizca de orgullo y ganas de ser mejores siempre. Nunca me han gustado mis trabajos, lo saben, me conocen. Pero aquí también pude expresar varios que supe robaron sonrisas, lágrimas, pensamientos, dudas y respuestas que más adelante fueron respondidas.

Llegó el momento de dar un paso al costado, no para retirarse, sino para ver un nuevo camino, uno que también me brindó una de las redacciones más importantes del país gracias a las relaciones que desarrollé. Lo hice en el momento que me sentí mejor preparado, más ambicioso, más deseoso y tolerante al cambio. No fue fácil, fueron meses de espera, de análisis, de reflexión. Uno nunca quiere irse del lugar que considera su hogar, donde muchas veces pasaste más horas que en tu hogar viendo cómo agradar a quienes te leen, te siguen. 

Me fui en el momento donde pude hacerlo por mis medios, gracias a mi decisión junto con mi familia, cuando nadie me obligó a tomar un rumbo de manera fortuita, sino cuando mis capacidades ya exigían un cambio de hábito, de rutina y crecimiento.

Puntualmente, gracias Nayib Canaán por confiarme, y soplarme, la oportunidad de llevar mis papeles cuando aún me faltaban seis meses para recibir mi título. Algo bueno viste y espero no haberte defraudado. Gracias por la oportunidad no solo de ejercer, sino de poder llevar un plato justo a la mesa donde comía en aquel entonces mi único chamo, Juan David, y ahora Mateo David. Dios y la Virgen te llenen de salud y éxitos en todos los proyectos que esa cabeza tuya maquina con cada respiración. A Gustavo Pérez, quien Dios retiró mucho antes de nuestro campo para disfrutar de su humildad. Gracias, pájaro, por lo enseñado con altruiso. 

Son muchas personas dentro de ese edificio a las que agradecer, ya con muchas lo hice. A mis dos jefes directos, Robinson González y Anaida Larreal, por sus malas caras, correcciones. Lo mejor, sus planteamientos e ideas. También a María Inés Delgado por permitirme entrar a la redacción multimedia, junto con el señor Eduardo Fernández. 

Sé lo que deseo, lo que quiero lograr. ¿Cómo lo haré? De la única manera que conozco, trabajando, pero sin ataduras de tiempo ni espacio. Siendo yo, siendo colaborador sin tener que pisar a otro para alcanzar ese escalón. Dios y la Virgen me iluminen y guíen en este camino. También espero que ustedes me echen una mano, como siempre. Gracias por todo, siempre agradecido todo, todo lo recibido.

Este sábado 25 de junio inicio un nuevo camino de manera formal, también, en uno de los medios más conocidos e importantes de la región Ya no será redactando para enormes páginas, sino para conversar, hacer lo que tanto he querido desde que tengo nueve años cuando formé parte de La Voz de la Fe en Maracaibo. Hoy comienza "OK Es Deportes" por OK 101, y llegó también en medio de celebraciones por su 25to. Aniversario.

En fin, gracias y más gracias por todo a Panorama, a todos. Que el deporte, las buenas noticias y la prosperidad de nuestro país nos reencuentre pronto. Espero no haber dejado nada por fuera. Muchos sentimientos florecen aún, pero es tiempo de soltar. ¡Suerte pues!

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