Sánchez busca el camino a la victoria

Anibal debuta esta noche buscando aumentar las 13 victorias y los 195 innings trabajados el año pasado, ambos, cifras más altas en su carrera.

El fantasma de las lesiones ha perseguido a Anibal Sánchez casi instantaneamente después de su temporada debut con los Marlins de Florida, en el 2006. El segundo criollo en lanzar un juego sin hits ni carreras en las Grandes Ligas no había podido trabajar a fondo hasta la zafra pasada, cuando por primera vez en su carrera alcanzó números topes y, hasta podría decirse, normales para un pitcher abridor. Pero Sánchez conoce de su potencial y que puede mejorar mucho esos números. "Gracias Dios he tenido un spring training bastante sano. Creo que el año pasado, a pesar que vine en buenas condiciones físicas, tenía latente el problema en mi brazo", comentó para Mi Diario en el Roger Dean Stadium en Jupiter, Florida. "Ya con eso bien (su brazo), este año me preparé para venir más fuerte y tener confianza. Creo que eso también se trabaja. Además, cuando estas en óptimas condiciones puedes hacer un mejor trabajo", aseguraba con mucha ilusión en poder lograr cosas durante esta temporada. "Trabajé lo suficiente en lo físico y mental fuera de temporada. No descansé mucho", explica acerca de lo que fue su preparación durante el tiempo muerto. "Me enfoque en (prepararme para) hacer más de lo que hice el año pasado. Trato de estar listo cada cinco días y salir a hacer lo mejor. Enfocarme y tratar de ir más lejos en los juegos, salir rápido de las situaciones y ganar más encuentros. Eso es en lo que más me enfocado". Anibal conoce lo importante que es estar siempre en excelentes condiciones. Por lo que mantuvo en mente quitarse unas cuantas libras para estar a un óptimo nivel cosa que, al final, no tomó como opción. "Mantuve mi peso, no quisie rebajar mucho. Me puse la meta de rebajar 20 libras más, pero era demasiado. Me traería problemas a la larga", comenta haciendo énfasis en que se mantendra entre las 200 y 205 libras. QUIERE ESTAR EN LA RUMBA. La última vez que los Marlins de Florida disfrutaron de una fiesta en octubre fue en el año en el que alcanzaron su último campeonato, sorpresivamente, ante los Yankees de Nueva York en el 2003. En ese entonces, Miguel Cabrera era la estrella emergente y posible figura del club para el futuro. Pero Sánchez ya no quiere ver más fotografías y recuerdos de esos años. El criollo desea poder llegar a una postemporada y, con la llegada del 'Utility Estrella', confía en que podrán conseguirlo. "La llegada de Omar (Infante) es muy buena tanto para la ofensiva y defensiva. Él tiene muchos años a lo largo de su carrera. Es lo que necesitamos como equipo, alguien que nos enrumbe por donde debemos ir. Infante tiene años aquí y aparte tuvo una campaña muy bonita el año pasado". El derecho mantiene fe en sus colegas abridores y en que los roles del equipo puedan cumplirse. "Tenemos una buena rotación con (Josh) Johnson, (Ricky) Nolasco (Javier) Vásquez. Nuestro relevo es solvente y en la defensa pienso que estamos muy bien. Podemos darle batalla a quien sea". ¿Y Venezuela? "¿Qué pasa con ella?", responde extrañado. ¿Podrán verte en tu país los fanáticos uniformado? "Es muy temprano para decidir si podré jugar con los Bravos. Siempre estoy dispuesto, pero creo que debo esperar el final de campaña para ver como estoy y como termino. HOY AL RUEDO Sánchez hará su debut esta temporada ante los Nacionales de Washington, equipo al que ha vencido cinco veces sin tener derrotas en 13 aperturas. En 79 episodios ha podido a abanicar a 55 y mantener una efectividad de 2.28. Publicado en el periódico Mi Diario, en Maracaibo, el 05 de abril de 2011. Ampliado especialmente para este espacio.